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27-Mar-2010 --

Después de varias consultas semanales, todo indicaba que el pronóstico del tiempo para el sábado 27 de marzo de 2010, era excelente para nuestro propósito. Así que viajamos, Silvia Lo Moro y Raine Golab, hasta el Complejo Hidroeléctrico Futaleufú, ubicado dentro del Parque Nacional Los Alerces, a 45 kms. de Esquel, transitando la ruta nacional Nº 259.

La bruma matinal era el anuncio de un día soleado y sin viento. En bahía Mansa nos encontramos a las 9:00 hs., con dos Guardaparques, Leandro Lema y Danilo Hernández Otaño, y nos embarcamos en un semi-rígido con motor Yamaha 40.

Durante casi dos horas, pasamos por los ex lagos Situación, Uno, Dos y Tres hasta aproximarnos al destino, navegamos sobre árboles sumergidos desde la construcción del complejo entre 1971-1978. La presa produjo la cobertura de cuatro lagos preexistentes para formar el actual embalse, el inmenso Amutui Quimei, nombre que en idioma nativo significa “belleza perdida”.

Llegamos a la costa a 493 msnm y comenzamos el ascenso guiándonos con GPS Garmin 12. Durante todo el trayecto la espesura de árboles que superaban los 30 metros de altura dificultó la obtención del registro satelital, por lo que la brújula nos resultó indispensable.

El bosque está compuesto por coihues, arrayanes y laurel, y el sotobosque por caña colihue, chaura y helechos. Todo ello entre una maraña de enredaderas y lianas propias de la selva valdiviana. Además, una importante acumulación de ceniza volcánica (de la erupción del cercano volcán Chaitén en mayo 2008) adherida a la vegetación que atravesábamos, caía sobre nosotros. El trayecto duró 4 horas y media, debido al difícil acceso que ofrecía la espesura de los cañaverales y lo inestable del suelo compuesto por ramas y cañas en descomposición, por el que nos abrimos paso machete en mano, además de dar varios rodeos a peñones y desniveles.

El lugar de la confluencia se halla sobre una pendiente rocosa muy pronunciada sin vista al lago. El punto quedó marcado con una estaca y la bandera argentina, y dentro de un frasco dejamos un registro de la fecha y de nuestros datos personales. El descenso nos llevó 120 minutos, hasta encontrarnos a las 19.00 hs. con nuestra compañera Raine que permaneció aguardándonos en el bote, en la más absoluta soledad y aislamiento durante siete horas.

Al regresar, el cielo se fue tiñendo de rojo; a la izquierda la luna llena por encima del cerro La Monja, se asomaba entre las nubes. A esa hora crepuscular, momento de fusión entre los últimos rayos del sol y lo envolvente de la noche, que cae recortando contrastes hasta cubrir todo de negro, nos unía la gran satisfacción del día y el sueño de ir por más.

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27-Mar-2010 --

After checking the weather forecast week after week, it seemed that Saturday, March the 27th, 2010, was going to be the perfect day for our purpose. So we set, Silvia Lo Moro and Raine Golab, for the Futaleufu hydroelectric complex, located within Los Alerces National Park, 45 kms away from Esquel, on Route N º 259.

The morning mist was the announcement of a sunny day without wind. At 9:00 am we had reached Mansa bay where we met two park rangers, Leandro Lema and Danilo Hernandez Otaño, and the four of us got on a semi-rigid boat with a 40 Yamaha motor.

For nearly two hours, passing by the former lakes Situación, Uno, Dos and Tres to approach our destination, we sailed among submerged trees that had been covered up with water since the construction of the complex between 1971-1978. The dam caused the disappearance of four existing lakes to form the current reservoir, the immense Amutui Quimei, native-language name that means "lost beauty".

We reached the coast located 493 masl and started to climb using a Garmin 12 GPS. Along the way the trees were over 30 meters high which made it difficult to obtain the satellite record, so we found it necessary to use a compass.

The forest is made up of coihues, myrtle and laurel, and the undergrowth of colihue cane, chaura and ferns. All this mixed up with vines and creepers typical of the valdivian jungle. In addition, a significant amount of volcanic ash (from the the eruption of the nearby Chaitén volcano, in May 2008) adhered to the vegetation, fell over us when we walked through. The journey lasted four and a half hours, due to difficult access offered by the thickness of the forest, the unstable ground made up of decaying branches and leaves through which we made our way, machete in hand, and the several rocks and unevenness we had to avoid.

The location of the confluence lies on a very steep rocky slope, without overlooking the lake. The point was marked with a stake and the argentine flag, and in a jar we placed a record of the date and of our personal data. Climbing down took us 120 minutes until we met our partner Raine at 07:00 pm, who had been waiting for us on the boat, in absolute solitude and isolation, for seven hours.

On our way home, the sky started painting red, the full moon over mountain La Monja showed through the clouds. In the twilight moment, when the last rays of the sun and the enveloping of the night melted, cutting out contrasts until everything was covered up in black, the great satisfaction of our achievement and the dream of going for more got us together.

Coordinator's Note: DCP encourage all visitor to not alter the confluence area and to not leave things that do not belong to the site.

In the Parque Nacional Los Alerces.