#1: [11-Jul-10] (incomplete)

English

05-May-2015 -- Habiendo leído el intento anterior para llegar a esta confluencia, comencé a estudiar algunas alternativas para no cometer el mismo error (el de quedar a un lado del canal y no poder transponerlo dado el ancho del mismo), y dibujé en GE varias alternativas para poder hacer una mejor aproximación.

Y, aprovechando que tendría que viajar a la zona del impenetrable Chaco-Salteño, y que estaría a no más de 300 km del objetivo, profundicé los estudios del terreno y una vez terminada nuestra misión en Salta, decidimos junto a un grupo de amigos que se ofrecieron acompañarme ir y tratar de llegar a este lugar de acceso por demás de difícil.

De tal forma que estando en Rivadavía en la provincia de Salta, fuimos hasta la localidad de Pichanal, y desde ahí hasta la localidad de Ing. Suarez. Una vez allí, comenzamos a probar algunas alternativas de tratar de ingresar por picadas de monte desde la ruta misma, pero eso no era posible ya que las citadas picadas no existían.

Entonces decidimos ir a ver bien el camino que anteriormente habían realizado y por el cual no habían podido llegar. Yendo por el camino que costea el canal vimos una precaria pasarela que atravesamos con bastante temor a que se derrumbara, pero esta resistió perfectamente el peso de nuestros vehículos, de tal forma que logramos llegar hasta una tranquera perteneciente a un campo privado, con la fortuna que en el mismo momento en que llegamos el dueño del campo estaba en ese lugar.

Inmediatamente le pedimos permiso, y el buen hombre, muy avanzado en edad, nos permitió entrar para que nosotros hiciéramos lo que teníamos que hacer, y nos comentó que no podría acompañarnos dado que él era una persona mayor y no se animaba a hacer un desafío de este tipo.

Siguiendo el camino, pudimos acercarnos a 3200 metros, lugar donde dejamos las camionetas y desde ese punto comenzamos a caminar en la espesura del monte.

Esto fue algo terrible, las ramas del monte hacían que por centenares de metros tuviéramos que caminarlos casi en posición agachada. Las ramas y los árboles con espinas nos fueron lastimando, el paso era cada vez más lento, teníamos que cuidarnos de no lastimarnos demasiado. Durante casi tres horas luchamos contra la misma naturaleza que se proponía no dejarnos avanzar, pero con coraje y perseverancia nos fuimos acercando y a las 17:44, después de tanto sacrificio logramos clavar los ceros en esta confluencia tan difícil.

La emoción fue muchísima, y descubrimos que si se puede cuando se ponen verdaderas ganas en lograr desafíos de este tipo. El regreso fue peor todavía, ya que nos sorprendió la noche y tuvimos que hacer el último tramo casi a ciegas por la espesura del monte.

Una vez que llegamos a las chatas, nos confundimos en un apretado abrazo, ya que el hecho de haber salidos sin grandes lastimaduras de ese temible monte, no hizo otra cosa más que ratificar que con sacrificio todo se puede!!!

English

05-May-2015 --Having read the previous attempt to arrive at this Confluence, I started to explore some alternatives to not make the same mistake (the stay to one side of the channel and not to transpose it given the width of the same), and drew on GE several alternatives to make a better approach.

Taking advantage of that you would have to travel to the inaccessible area of the Chaco-Salteño, and it would be at no more than 300 km from the objective, deepened field studies and finished our mission in Salta, decided together with a group of friends who volunteered to accompany me go and try to get to this place of difficult access.

So that being in Rivadavia in the province of Salta, we went to the town of Pichanal, and from there to the town Ing. Suarez. Once there, begin to test some alternatives to treat from you enter by dirty roads from the same route, but that was not possible since these roads do not exist.

So we decided to go to see the road that previous visitor used. Going by the path that coasting the canal, we saw a precarious walkway so we went through with enough fear that it collapsed, but this perfectly resisted the weight of our vehicles, so that we were able to reach a gate belonging to a private field, with fortune at the same time that we arrived, the owner of the field was in that place.

Immediately we ask permission, and the good man, very advanced in age, allowed us to enter and told us he could not accompany us since he was one senior and not dare to make a challenge of this type.

Following the path, we could reach 3200 meters from CP, where we let the trucks and from that point we began to hike through the thicket bushes.

This was something terrible, the branches of the bushes made by hundreds of meters we had to walk them almost in a crouching position. Branches and trees with thorns were hurting us, the step was increasingly slow, and we had to take care not to hurt us too. For nearly three hours we were fighting against nature itself proposed not to let us move forward, but with courage and perseverance we went closer and at 17:44, after so much sacrifice managed to nail the zeros in this difficult confluence.

The excitement was high, and we found that it can be done when one get real desires to achieve such challenges. The return was worse still, since we were surprised by the night and we had to make the last stretch nearly blind by the thickness of the bushes.

Once we got to the truck, we were confuse in a tight embrace, as the fact of having left without major injuries of this formidable forest, did nothing more than ratify that with sacrifice everything is possible!